Durante un carrete confinado, el bailarín permanece dentro de un cuadrado designado, utilizando un juego de pies ágil y patrones de baile intrincados para ejecutar los distintos pasos. La característica clave es que los pasos están "confinados" a un área específica, mostrando la técnica, la precisión y la capacidad del bailarín para mantener un movimiento continuo dentro del espacio reducido.
El carrete confinado a menudo se baila durante presentaciones competitivas en solitario de danza irlandesa, donde los bailarines demuestran sus habilidades en la ejecución de pasos intrincados y patrones intrincados de juego de pies mientras permanecen dentro de los límites del cuadrado. Destaca el control, la musicalidad y la precisión del juego de pies del bailarín.
El carrete confinado es un elemento de danza desafiante y visualmente atractivo que demuestra la capacidad del bailarín para adaptar sus movimientos a un área específica, agregando una capa adicional de complejidad a su actuación.