1. Haz ejercicios dirigidos específicamente a los muslos. Como sentadillas, estocadas y extensiones de piernas.
2. Lleve una dieta saludable y obtenga suficientes proteínas. Reduzca las calorías y evite los alimentos procesados, las bebidas azucaradas y las cantidades excesivas de grasas no saludables.
3. Haz ejercicios cardiovasculares con regularidad. Caminar, correr y andar en bicicleta son excelentes opciones.
4. Reducir el estrés. Maneje el estrés mediante ejercicio, yoga o meditación.
5. Practique el control de las porciones. Consuma comidas más pequeñas con más frecuencia y cuide sus porciones.
6. Bebe mucha agua. Manténgase hidratado para mejorar la salud general y apoyar la pérdida de peso.
7. Duerme lo suficiente. Trate de dormir entre 7 y 8 horas por noche.
8. Busca ayuda profesional si es necesario. Hable con un médico o nutricionista si tiene dificultades para reducir la grasa de los muslos por su cuenta.