Los orígenes del hip hop se remontan a la ciudad de Nueva York, particularmente en el Bronx. La aparición del graffiti como parte del hip hop está estrechamente ligada al entorno urbano y al deseo de los jóvenes de afirmar su individualidad y creatividad. Los artistas callejeros solían utilizar latas de aerosol para crear murales visualmente impactantes y escribir sus nombres o mensajes cortos en trenes subterráneos, paredes y otros espacios públicos.
Algunas personas, como CORNBREAD, TAKI 183, LEE, BARBARA 62, PHASE 2, CRASH y LADY PINK, son consideradas pioneras del graffiti hip hop y tuvieron una influencia significativa en su desarrollo y estilo. Aportaron su enfoque y perspectiva artísticos únicos, utilizando el graffiti como medio de autoexpresión, comunicación y narración, reflejando sus experiencias y la cultura de la que formaban parte.
El graffiti del hip hop jugó un papel esencial en la configuración del paisaje visual de las áreas urbanas y se convirtió en un símbolo de resistencia, identidad y expresión artística dentro de la comunidad. A menudo transmitía mensajes políticos y sociales y servía de plataforma para que individuos y grupos comunicaran sus pensamientos e ideas. Con el tiempo, el graffiti se volvió mundialmente reconocido y adquirió valor cultural y artístico, evolucionando desde sus humildes orígenes callejeros hasta convertirse en una forma de arte respetada.