Cada participante en el punto muerto tiene un recurso que el otro necesita. Por ejemplo, imagine dos transacciones, T1 y T2. T1 ha bloqueado el recurso A y T2 ha bloqueado el recurso B. T1 necesita que el recurso B se complete, pero no puede obtenerlo hasta que T2 libere el bloqueo. De manera similar, T2 necesita el recurso A para completarse, pero no puede obtenerlo hasta que T1 libere el bloqueo. Esto crea un punto muerto.
Lo que diferencia un punto muerto fantasma de un punto muerto normal es que los participantes no se conocen entre sí. Cada uno de ellos intenta hacer lo suyo, pero sin darse cuenta se bloquean entre sí.
Los puntos muertos fantasma son difíciles de detectar porque no son causados por ningún punto único de falla. Son causados por la naturaleza distribuida del propio sistema. Como resultado, pueden ser muy difíciles de resolver.
Una forma de resolver los interbloqueos fantasmas es aumentar la cantidad de bloqueos en el sistema. Esto hace que sea menos probable que dos transacciones necesiten bloquear los mismos recursos al mismo tiempo. Otra forma de resolver interbloqueos fantasmas es utilizar tiempos de espera. Si una transacción no libera un bloqueo después de un cierto período de tiempo, se cancela y se libera el bloqueo.
Los interbloqueos fantasma son poco comunes, pero pueden ser un problema grave cuando ocurren. Al comprender qué son y cómo resolverlos, puede ayudar a mantener sus sistemas distribuidos funcionando sin problemas.