Dicho esto, hay casos a lo largo de la historia en los que las mujeres han desempeñado papeles importantes al iniciar o liderar conflictos. A continuación se muestran algunos ejemplos:
1. Emperatriz Wu Zetian (China) :Gobernó China del 690 al 705 d.C. y fue la única mujer que ostentó el título de emperador. Durante su reinado, la emperatriz Wu emprendió campañas militares para expandir el territorio chino, incluidas conquistas de regiones vecinas como Corea y partes de Asia Central.
2. Reina Isabel I (Inglaterra) :La reina Isabel I de Inglaterra reinó de 1558 a 1603 y era conocida por su estilo de liderazgo asertivo. Si bien no dirigió directamente campañas militares, su reinado vio varios conflictos, como la Guerra Anglo-Española, en la que defendió los intereses de Inglaterra contra España y apoyó expediciones navales contra las flotas españolas.
3. Juana de Arco (Francia) :Juana de Arco, también conocida como la "Dama de Orleans", fue una campesina francesa que dirigió campañas militares durante la Guerra de los Cien Años (1337-1453) entre Inglaterra y Francia. Creía que había recibido guía divina para ayudar a Francia a derrotar a los ingleses y desempeñó un papel crucial en varias victorias, elevando la moral francesa e inspirando a las fuerzas leales a la monarquía francesa.
4. Emperatriz Catalina II (Rusia) :Catalina II, también conocida como Catalina la Grande, gobernó Rusia de 1762 a 1796. Durante su reinado, participó en varias guerras para expandir el territorio ruso, incluidas las guerras ruso-turcas y las particiones de Polonia.
Es importante señalar que atribuir las guerras únicamente a las mujeres es una simplificación excesiva de acontecimientos complejos. Los conflictos históricos a menudo implican una combinación de factores políticos, económicos, religiosos y de otro tipo que impulsan la toma de decisiones y los resultados.