Hay varias razones por las que Juana de Arco es considerada una heroína. Primero, mostró gran valentía y liderazgo en la batalla. Pudo reunir a las tropas francesas y llevarlas a la victoria contra viento y marea. En segundo lugar, era una persona profundamente religiosa motivada por su fe. Creía que tenía la misión de Dios de salvar a Francia y estaba dispuesta a sacrificar su propia vida por sus creencias. En tercer lugar, fue un símbolo de esperanza para el pueblo francés durante una época de gran desesperación. Ella les mostró que incluso en los momentos más oscuros, siempre hay esperanza de victoria.
Juana de Arco es una figura compleja y controvertida, pero también es un poderoso símbolo de esperanza e inspiración. Nos recuerda que incluso las personas más comunes pueden hacer cosas extraordinarias cuando están motivadas por un propósito superior.