O'Connor es una conservadora moderada y es conocida por su voto decisivo en muchos casos. A menudo ha sido el voto decisivo en 5 o 4 decisiones.
O'Connor también es conocida por su trabajo sobre la igualdad de género. Ha sido una firme defensora de los derechos de las mujeres y ha escrito varias opiniones sobre el tema.
En 2009, O'Connor recibió la Medalla Presidencial de la Libertad, el honor civil más alto de Estados Unidos.
O'Connor es un juez retirado y actualmente no ocupa ningún cargo público. Es una figura legendaria del derecho estadounidense y está considerada una de las juristas más influyentes del siglo XX.