Las creencias religiosas de William estaban en consonancia con las de la Iglesia católica de su época. Creía en la divinidad de Jesucristo, la Trinidad y la autoridad del Papa. También apoyó los sacramentos y la veneración de los santos.
Las opiniones religiosas de William tuvieron un impacto significativo en sus políticas y acciones como rey. Usó la religión para justificar su conquista de Inglaterra y consolidar su poder. También buscó difundir el cristianismo entre sus súbditos y reformar la iglesia inglesa.
En general, Guillermo el Conquistador era un cristiano devoto que utilizó sus creencias religiosas para dar forma a su vida personal y sus políticas políticas.