- "Operación Kino": La trama central de la película gira en torno a un estreno nazi en París para ver una película de propaganda sobre el asesinato de Adolf Hitler. No hubo tal evento en la vida real.
- Hitler y Goebbels asistieron: Hitler rara vez se aventuró fuera de Alemania durante la guerra y ciertamente no se habría arriesgado a visitar la Francia ocupada por los nazis. Se sabía que el ministro de Propaganda, Joseph Goebbels, tenía mucho miedo a volar y rara vez salía de Berlín.
- El cine del sótano: No hay pruebas de que Hitler tuviera un cine privado en el sótano de la Ópera Garnier de París ni en ningún otro lugar.
- Los Bastardos: Si bien hubo numerosos comandos aliados y unidades partidistas operando detrás de las líneas enemigas durante la guerra, no hay evidencia de ningún grupo que se especializara en matar a líderes nazis de alto rango arrancándoles el cuero cabelludo.
- El idioma alemán: Los actores que interpretan personajes nazis a menudo tienen acentos alemanes inconsistentes y los subtítulos de algunos diálogos en alemán no reflejan con precisión lo que se dice.
- Los comandos británicos: La descripción que hace la película de los comandos británicos como asesinos despiadados es inexacta. Si bien los comandos eran una fuerza de combate eficaz y altamente calificada, también eran conocidos por su disciplina y profesionalismo.
- El final: La conclusión de la película, donde el teatro explota con el alto mando nazi dentro, es ficticia. En realidad, Hitler sobrevivió a la guerra hasta 1945 y se suicidó en Berlín.
Es importante señalar que Bastardos sin gloria es una obra de ficción y la precisión histórica no era el objetivo principal de los realizadores. El objetivo principal de la película era entretener y proporcionar un final ficticio alternativo para la Segunda Guerra Mundial.