1. Falta de evidencia en contrario:
Una de las principales razones para creer que Shakespeare fue fiel a su esposa es la ausencia de pruebas concretas de lo contrario. A pesar de ser una figura muy conocida y documentada de su época, no existen registros ni relatos de relaciones extramatrimoniales o escándalos que involucren a Shakespeare. Esto hace suponer que mantuvo una vida personal fiel y discreta.
2. Sonetos de Amor:
Algunos de los sonetos de Shakespeare, particularmente los de la primera parte de la secuencia, expresan un profundo amor y admiración por la "Bella Juventud". Sin embargo, generalmente se acepta que estos sonetos fueron escritos como ejercicios poéticos y no necesariamente basados en experiencias personales. Los sonetos dedicados a la "Dama Oscura" son de naturaleza más ambigua y podrían insinuar una posible aventura amorosa. Sin embargo, es fundamental señalar que estos poemas son obras de ficción y no necesariamente autobiográficas.
3. El testamento:
En su testamento, Shakespeare dejó la mayor parte de su patrimonio a su esposa, Anne. Esto sugiere un alto nivel de confianza y afecto entre la pareja. Si hubiera estado involucrado en infidelidades importantes, es probable que hubiera sido menos generoso en sus provisiones para Anne.
4. Duración del matrimonio:
Shakespeare y Anne Hathaway estuvieron casados durante más de 30 años, lo que fue un matrimonio largo y estable para los estándares de la era isabelina. Esta longevidad podría indicar una relación fiel y mutuamente satisfactoria.
Es importante recordar que la vida personal de Shakespeare sigue siendo objeto de especulación y no hay forma de saber con certeza si fue fiel a su esposa. Sin embargo, la evidencia disponible sugiere que mantuvo una relación fiel y comprometida con Anne Hathaway durante todo su matrimonio.