El Renacimiento: Shakespeare vivió durante el Renacimiento, un período de grandes cambios culturales e intelectuales en Europa. El Renacimiento vio un renovado interés en el aprendizaje, la literatura y el arte clásicos. Esta influencia es evidente en las obras de Shakespeare, que a menudo se basan en fuentes clásicas y presentan personajes bien educados y cultos.
La Reforma Protestante: La Reforma Protestante, que comenzó a principios del siglo XVI, tuvo un impacto significativo en Inglaterra y la cultura inglesa. La Reforma provocó una disminución del poder de la Iglesia católica y el surgimiento del protestantismo. Esta agitación religiosa se refleja en las obras de Shakespeare, que a menudo exploran temas religiosos y presentan personajes que luchan contra dudas religiosas o persecución.
La época isabelina: Shakespeare vivió durante el reinado de la reina Isabel I, una época de gran prosperidad y florecimiento cultural en Inglaterra. La época isabelina vio el auge del teatro inglés y Shakespeare fue uno de los dramaturgos más populares de la época. Sus obras reflejan los valores e intereses de la Inglaterra isabelina, incluido el amor por el lenguaje, la celebración de la historia y la exploración de la naturaleza humana.
El teatro de Londres: La carrera de Shakespeare como dramaturgo estuvo marcada por la escena teatral de Londres. Londres albergaba varios teatros, incluido el famoso Globe Theatre, donde a menudo se representaban las obras de Shakespeare. La escena teatral de Londres era competitiva y exigente, y Shakespeare tuvo que escribir obras que atrajeran a una amplia gama de audiencias. Esto se refleja en la diversidad de sus obras, que van desde comedias a tragedias, de historias a romances.
Sus contemporáneos: Shakespeare fue influenciado por el trabajo de otros escritores de su época, incluidos Christopher Marlowe, Ben Jonson y Thomas Kyd. Shakespeare también estuvo influenciado por la literatura clásica, incluidas las obras de Ovidio, Séneca y Plutarco.
Su vida personal: La vida de Shakespeare a menudo se refleja en sus obras. Por ejemplo, su hijo Hamnet murió en 1596, y el dolor de Shakespeare por la muerte de su hijo es evidente en la obra "Hamlet".
Estos son sólo algunos de los factores que influyeron en la vida y obra de Shakespeare. Shakespeare fue un hombre complejo y multifacético, y su obra refleja una amplia gama de influencias.