Según la idea del hedonismo popular, las personas suelen tomar decisiones basadas únicamente en su capacidad para maximizar su propio placer sensorial y evitar la incomodidad en el momento presente. Esto puede resultar en un enfoque limitado en los placeres a corto plazo y en un desprecio por los posibles impactos negativos de esas acciones en ellos mismos, en los demás o en la sociedad en su conjunto.
El hedonismo popular contrasta con enfoques filosóficos y éticos más complejos de la felicidad, que consideran factores como la virtud, el significado, el crecimiento personal, las relaciones y el bienestar de los demás como aspectos importantes de una vida plena.
Si bien buscar placer y evitar el dolor son deseos humanos naturales, el hedonismo popular sugiere una tendencia a simplificar demasiado y priorizar el disfrute sensorial a expensas de otras fuentes significativas y sostenibles de felicidad. Los críticos argumentan que depender únicamente de la búsqueda de placer a menudo conduce a una falta de realización personal y puede socavar consideraciones sociales y éticas más amplias.