Así es como Marianne cambia a lo largo de la historia:
1.Rasgos de carácter iniciales:
- Marianne se caracteriza por sus emociones fervientes y su extrema sensibilidad. Ella expresa rápidamente tanto su alegría como su tristeza sin restricciones. Sus emociones a menudo la arrastran, haciéndola menos práctica y más propensa a nociones románticas.
2.Influencias tempranas:
- Marianne inicialmente está fuertemente influenciada por su hermana mayor, Elinor, que representa la razón y la practicidad. Elinor suele ser una voz de precaución, aconsejando a Marianne que controle sus emociones y actúe con prudencia.
3.Influencia de Willoughby:
- Las emociones de Marianne la llevan a enamorarse profundamente de Willoughby, un hombre encantador pero, en última instancia, poco confiable. Ella lo idealiza y es ciega a sus defectos debido a sus fuertes sentimientos. Este enamoramiento resalta su susceptibilidad inicial a las ilusiones románticas.
4.Desamor y lecciones:
- Después del repentino abandono de Willoughby y su posterior compromiso con otra mujer, Marianne experimenta un intenso dolor emocional. Esta angustia la obliga a enfrentar la realidad y comienza a darse cuenta de que es posible que sus juicios y emociones pasadas no siempre se hayan basado en un razonamiento sólido.
5.Crecimiento y madurez:
- Mientras Marianne lidia con su dolor de corazón, se somete a un período de reflexión y autoexamen. Reconoce la importancia de equilibrar la emoción con la razón, aprender de sus errores y aceptar que puede haber más consideraciones prácticas a tener en cuenta.
6.Perspectiva cambiada sobre el amor:
- Los ideales románticos de Marianne se ven desafiados cuando conoce al coronel Brandon, un hombre reservado y honorable. A través de sus interacciones con él, ella comienza a apreciar relaciones más maduras y estables basadas en el respeto y la comprensión mutuos.
7.Reconciliación y Equilibrio:
- Hacia el final de la novela, Marianne logra un equilibrio entre sus emociones y su intelecto. Se reconcilia con Willoughby y finalmente encuentra la felicidad en un matrimonio adecuado con el coronel Brandon.
El viaje de Marianne a lo largo de la novela ilustra la exploración de Austen de temas como el romanticismo versus el realismo, la importancia de encontrar un término medio entre la emoción y la razón, y el crecimiento y la madurez que a menudo provienen de las experiencias y lecciones de la vida.