Como una danza etérea de luz,
El neón teje su magia en la noche.
Con trazos vibrantes pinta el aire,
Un tapiz luminoso, incomparable.
Tonos eléctricos, intensos y atrevidos,
Un faro de brillantez, las historias se desarrollan.
Susurrando secretos, hablan de sueños,
El aura encantadora de Neon brilla suavemente.
En las ciudades bulliciosas, cobra vida,
Un latido palpitante, una lucha vibrante.
Las siluetas del horizonte se mantienen altas y orgullosas,
El neón corona sus cabezas, una multitud deslumbrante.
Los mensajes de marquesina nos llaman la atención,
Atrayéndonos con su apariencia vibrante.
Teatros y clubes cobran vida.
El neón guía el camino y mantiene vivos los sueños.
En los letreros de neón reside el arte,
Un juego de formas, donde se esconde la magia.
Florituras y bucles que se retuercen juguetonamente,
El arte de Neon, una verdadera cita visual.
A lo largo de las carreteras ilumina el camino,
Una luz guía, ya sea de día o de noche.
Moteles y restaurantes, nos invitan a acercarnos,
El encanto del neón que disipa todo miedo.
Pero cuando sale el sol y llega el amanecer,
El neón se desvanece, el momento de despedida.
Sin embargo, en nuestros recuerdos, su brillo permanece,
Una sinfonía de luz, a través de días interminables.
Así que deleitémonos en este sueño de neón,
Donde cada rincón brilla con un brillo vibrante.
Porque en el abrazo del neón encontramos consuelo y alegría,
Un caleidoscopio de colores, un mundo sin aleación.