La poesía formal se caracteriza por su estricto cumplimiento de un conjunto específico de reglas y convenciones. Estas reglas pueden incluir el número de líneas en una estrofa, el esquema de rima y la métrica (el patrón de sílabas acentuadas y átonas). La poesía formal suele tener un aire tradicional o clásico y suele utilizarse para expresar pensamientos y emociones serios o elevados.
Algunos ejemplos de poesía formal incluyen el soneto, el haiku y la oda. El soneto es un poema de 14 versos que sigue un esquema de rima y una métrica específicos. El haiku es un poema de tres versos que sigue un patrón de 5-7-5 sílabas. La oda es un poema largo y elaborado que normalmente expresa elogios o admiración por una persona, lugar o cosa.
Escribir poesía formal puede ser un desafío, pero también puede ser muy gratificante. Siguiendo las reglas y convenciones de la poesía formal, los poetas pueden crear obras de arte hermosas y memorables.