Se cree que la frase "los tontos se apresuran" se originó en el siglo XVI y fue popularizada por el poeta inglés Alexander Pope en su poema de 1711 "Un ensayo sobre la crítica". El Papa escribió:"Porque los tontos se precipitan donde los ángeles temen pisar".
El proverbio se ha utilizado en la literatura y la cultura popular desde entonces. Por ejemplo, es el título de una película de 1933 protagonizada por Cary Grant y Carole Lombard, y también es el título de una canción de la banda de rock británica Queen.
El proverbio "los tontos corren donde los ángeles temen pisar" es un recordatorio de que es importante ser cauteloso y pensar detenidamente sobre los riesgos involucrados antes de actuar.