Se cree que mentir compulsivamente es un mecanismo de defensa contra la ansiedad, la baja autoestima u otros problemas emocionales. Las personas con mentiras compulsivas pueden sentir una intensa vergüenza o culpa por su vida real, por lo que crean un mundo de fantasía para escapar de su realidad. También pueden mentir para ganarse la atención, la aprobación o la admiración de los demás.
Mentir compulsivamente puede tener graves consecuencias tanto para la persona que miente como para las personas que le rodean. Las personas que mienten compulsivamente pueden perder sus trabajos, sus relaciones y su reputación. También pueden desarrollar depresión, ansiedad o problemas de abuso de sustancias.
Si cree que usted o alguien que conoce está luchando contra la mentira compulsiva, existen recursos disponibles para ayudarlo. Los terapeutas pueden ayudar a las personas a comprender las causas subyacentes de sus mentiras compulsivas y desarrollar estrategias para controlar su afección.