Los fusibles brindan protección contra cortocircuitos al interrumpir rápidamente el circuito cuando la corriente excede el valor nominal. Sin embargo, los fusibles no brindan protección contra sobrecargas, que son corrientes sostenidas que exceden la capacidad de transporte de corriente de los conductores del circuito. Las sobrecargas pueden provocar sobrecalentamiento y daños a los conductores y dispositivos del circuito, pero no provocarán que se funda un fusible a menos que también provoquen un cortocircuito.
2). Fallas a tierra
Los fusibles tampoco brindan protección contra fallas a tierra, que ocurren cuando el conductor activo entra en contacto con una superficie conectada a tierra u otro conductor conectado a tierra. Las fallas a tierra no necesariamente causan un flujo de corriente elevado y pueden no ser suficientes para fundir un fusible. Las fallas a tierra pueden ser peligrosas porque pueden crear un potencial de voltaje en superficies y gabinetes metálicos y pueden causar descargas eléctricas.
Para proporcionar protección contra sobrecargas y fallas a tierra, en las instalaciones eléctricas se utilizan dispositivos de protección adicionales como disyuntores, disyuntores de fuga a tierra (ELCB) o dispositivos de corriente residual (RCD).