* Lo suficientemente distintivo como para ser considerado original. Esto significa que el título debe ser único y no meramente descriptivo del contenido de la canción. Por ejemplo, el título "Te amo" no se consideraría original, pero sí el título "Strawberry Fields Forever".
* Utilizado de forma creativa. Esto significa que el título debe ser más que una simple declaración de hecho. Por ejemplo, el título "The Beatles" no se consideraría creativo, pero el título "¡AYUDA!" sería.
Si el título de una canción cumple con estos requisitos, puede tener derechos de autor y el propietario de los derechos de autor tendrá el derecho exclusivo de utilizar el título en relación con la canción. Esto significa que nadie más puede utilizar el título sin el permiso del propietario de los derechos de autor.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que la protección de los derechos de autor de los títulos de las canciones es limitada. Los propietarios de derechos de autor no pueden impedir que otros utilicen el mismo título para una canción diferente o para una obra no musical. Por ejemplo, el propietario de los derechos de autor de la canción "Imagine" no puede impedir que alguien escriba un libro llamado "Imagine" o haga una película llamada "Imagine".