El sonido se produce cuando la energía, en un sólido, líquido o gas, provoca oscilaciones (vibraciones o temblores) que se propagan a través de un medio, siendo los cambios resultantes en la presión del aire entendidos como sonido por el órgano receptor (por ejemplo, el oído). . Por lo tanto, el sonido requiere vibración (ondas mecánicas) a través de un sólido, líquido o gas para llegar a nosotros.
En física, el sonido es una vibración que se propaga como una onda acústica, a través de un medio de transmisión como un gas, líquido o sólido. En fisiología y psicología humana, el sonido es la recepción de dichas ondas y su percepción por parte del cerebro. La teoría musical analiza el sonido tanto desde un nivel auditivo como científico.
Una diferencia clave entre el audio y la música es que la música suele ser intencional. Cuando alguien crea música, está organizando intencionalmente los sonidos de una manera específica para crear una composición musical. Por otro lado, el audio puede ser intencional o no. Por ejemplo, una persona que habla crea un audio intencional, mientras que el canto de un pájaro crea un audio no intencional.
Otra diferencia clave entre el audio y la música es que la música normalmente se organiza de una manera que agrada al oyente. Esto se puede hacer mediante el uso de melodía, armonía, ritmo y timbre. Si bien el audio también puede ser agradable para el oyente, no necesariamente está organizado de una manera específicamente diseñada para ser musical.
En general, el audio y la música son formas de sonido, pero difieren en su definición y en la forma en que se usan normalmente. El audio se considera cualquier cosa que se pueda escuchar, mientras que la música son sonidos específicamente organizados y diseñados para agradar al oyente.