Diámetro: El diámetro de una baqueta se mide en pulgadas y normalmente oscila entre 0,500 pulgadas y 0,650 pulgadas. Generalmente se prefieren baquetas más delgadas (de 0,500 a 0,550 pulgadas) para tocar la batería de jazz, ya que brindan una sensación más ligera y permiten un mayor control y articulación. Las baquetas más gruesas (de 0,575 a 0,650 pulgadas) son más adecuadas para estilos de batería más pesados, como el rock y el pop.
Longitud: La longitud de una baqueta se mide en pulgadas y normalmente oscila entre 15 y 17 pulgadas. Generalmente se prefieren los palos más largos (de 16 a 17 pulgadas) para tocar la batería de jazz, ya que brindan un mayor alcance y permiten una gama más amplia de técnicas de ejecución. Las baquetas más cortas (de 15 a 15,5 pulgadas) son más adecuadas para tocar la batería en rock y pop, donde la velocidad y la potencia son más importantes.
Forma de la punta: La forma de la punta de una baqueta puede tener un impacto significativo en el sonido de la batería. Las puntas redondas producen un sonido más brillante y articulado, mientras que las puntas ovaladas producen un sonido más cálido y apagado. Las puntas de bellota se encuentran en algún punto intermedio, proporcionando un equilibrio de brillo y calidez.
En última instancia, la mejor manera de elegir el tamaño correcto de baquetas para tocar jazz es experimentar con diferentes tamaños y formas de punta hasta encontrar un par que se sienta cómodo y le permita tocar la música que desea tocar.