En Estados Unidos, la Motion Picture Association of America (MPAA) asigna clasificaciones a las películas en función de su contenido. Las películas con clasificación R se consideran apropiadas solo para adultos y los niños menores de 17 años deben estar acompañados por un padre o tutor para poder verlas.
Sin embargo, algunos cines pueden tener una política que permite a los jóvenes de diecisiete años comprar entradas para películas clasificadas como r para dos adolescentes, siempre que los adolescentes estén acompañados por un padre o tutor. Esta política generalmente se basa en el supuesto de que el joven de diecisiete años es lo suficientemente maduro como para comprender el contenido de la película y tomar una decisión informada sobre si verla o no.
Es importante tener en cuenta que esta política no es universal y es posible que algunos cines no permitan que los jóvenes de diecisiete años compren entradas para películas clasificadas como r para dos adolescentes, independientemente de si están acompañados o no por un padre o tutor. Por lo tanto, siempre es mejor consultar la política del teatro antes de intentar comprar entradas.