En la obra, una serie de identidades equivocadas y malentendidos debido a la incapacidad de los personajes para reconocer las verdaderas identidades de los demás genera mucha confusión y caos. Esto muestra lo importante que es tomarse el tiempo para comprender a alguien y no hacer suposiciones basadas en apariencias físicas o información limitada.
Otra lección moral destacada en la obra es la importancia de la veracidad y la comunicación honesta. La obra demuestra cómo las mentiras y el engaño pueden complicar aún más las situaciones y prolongar los malentendidos, causando problemas y angustias innecesarias a los personajes involucrados.
También enfatiza el valor del autodescubrimiento y la autoaceptación. Los errores y malentendidos de los personajes en la obra conducen a una profunda comprensión de sus verdaderas identidades y sus relaciones entre sí. Esto subraya la importancia de saber quién es usted y cómo sus acciones afectan a los demás.