1. Razón histórica :La tradición de utilizar el verde en entornos quirúrgicos se remonta a finales del siglo XIX, cuando un médico alemán llamado Hermann von Helmholtz descubrió que el ojo humano es más sensible a la luz verde. Observó que el verde reduce la fatiga ocular y la aberración cromática (distorsión de los colores) durante las cirugías, lo que permite a los cirujanos distinguir más fácilmente los tejidos rojos y la sangre de otros tejidos.
2. Percepción del color :El ojo y el cerebro humanos son muy sensibles a los colores rojo y naranja, lo que puede provocar fatiga ocular y dificultad para distinguir entre los tejidos rojos y la sangre durante la cirugía. El verde, al ser complementario del rojo, reduce el impacto del rojo en los ojos del cirujano, permitiendo una mejor percepción del campo quirúrgico.
3. Mejora del contraste :El verde proporciona un fondo contrastante para los tejidos rojos y la sangre, lo que facilita a los cirujanos identificarlos y diferenciarlos de los órganos y tejidos circundantes. Este contraste mejora la precisión quirúrgica y reduce el riesgo de errores durante las operaciones.
4. Efecto calmante :El color verde se asocia con la calma y la relajación. Se ha descubierto que tiene un efecto calmante tanto en el equipo quirúrgico como en el paciente, reduciendo la ansiedad y el estrés durante los procedimientos quirúrgicos.
5. Importancia cultural :En algunas culturas, el verde simboliza crecimiento, renovación y curación, lo que lo convierte en una opción adecuada para el entorno del quirófano, donde el objetivo es curar y restaurar la salud.
Si bien el verde sigue siendo el color dominante en muchos quirófanos de todo el mundo, algunos centros de atención médica pueden usar colores diferentes, como el azul o el verde azulado, por variedad o preferencia personal.