Si bien es cierto que algunas tragedias griegas pueden no contener tanta violencia gráfica como algunas tragedias de Shakespeare, no es una generalización precisa afirmar que las tragedias griegas suelen ser menos violentas y sangrientas. Muchas tragedias griegas, como "Edipo Rey" de Sófocles y "Agamenón" de Esquilo, presentan violencia, asesinatos y derramamiento de sangre significativos.