Diferencias culturales: Las tradiciones y gustos musicales franceses diferían significativamente de los de Alemania, donde la música de Wagner había sido aclamada. El público francés estaba acostumbrado a óperas con melodías más ligeras, estructuras armónicas más simples y formas musicales más convencionales. Las complejas texturas orquestales, el cromatismo y la técnica del leitmotiv de Wagner se consideraron demasiado radicales y poco melódicos para la sensibilidad francesa.
Rivalidad Nacional: El período que coincidió con el estreno de "Tannhäuser" estuvo marcado por una intensificación de las tensiones entre Francia y Alemania. Las dos naciones habían estado recientemente en guerra y la animosidad persistía. La asociación de Wagner con la cultura alemana y su reputación como innovador musical asociado con el nacionalismo alemán despertaron una resistencia patriótica entre el público francés.
Controversia del ballet: La inclusión de una escena de ballet en el segundo acto de "Tannhäuser" provocó indignación. La escena, en la que aparecían bailarines con poca ropa y que se percibía como excesiva, fue considerada inapropiada e irrespetuosa por muchos espectadores franceses. Las protestas estallaron durante esta sección y la situación se volvió cada vez más caótica.
Oposición a las teorías de Wagner: Los escritos y teorías de Wagner sobre la música, que enfatizaban la Gesamtkunstwerk (obra de arte total) y la supremacía de la música sobre el texto, también fueron objeto de críticas en Francia. Los críticos y músicos franceses rechazaron su enfoque, considerándolo una infracción de las convenciones operísticas tradicionales.
Facciones musicales rivales: La escena musical parisina estaba dividida entre los partidarios de la ópera tradicional francesa y los defensores de las nuevas tendencias. La música de Wagner representó una intrusión en el panorama musical establecido, y las facciones conservadoras dentro del mundo de la ópera parisina lo vieron como una amenaza. Esto se sumó a la hostilidad dirigida hacia "Tannhäuser".
Mala adaptación :También cabe mencionar que la adaptación francesa del libreto no fue bien recibida. La traducción fue criticada por su mala calidad y algunos sintieron que no captaba la esencia del texto original de Wagner.
La combinación de diferencias culturales, rivalidades nacionales, excesos artísticos percibidos y resistencia a las innovaciones musicales de Wagner llevaron a la tumultuosa recepción de "Tannhäuser" en París. A pesar de la reacción negativa en su estreno, la ópera ha ganado desde entonces una aceptación más amplia y ahora es reconocida como una de las obras más importantes de Wagner.