Las obras de Noh se representan en un escenario típicamente cuadrado o rectangular, con una plataforma elevada en la parte trasera para los actores. El escenario suele estar decorado con accesorios sencillos, como un árbol o una piedra, y los actores utilizan una variedad de gestos y movimientos para transmitir sus emociones y contar la historia.
Las obras de Noh van acompañadas de música que se toca con una variedad de instrumentos, como la flauta, el tambor y el gong. La música suele ser muy lenta y meditativa y ayuda a crear la atmósfera de la obra.
Las obras de Noh suelen ser interpretadas por un grupo de actores, todos ellos vestidos con trajes y máscaras elaborados. Los disfraces suelen ser muy coloridos y detallados y ayudan a crear los personajes de la obra. Las máscaras también son muy importantes, y ayudan a transmitir las emociones de los personajes.
Las obras de Noh suelen representarse de una manera muy estilizada, con los actores moviéndose lenta y deliberadamente. Los actores utilizan una variedad de gestos y movimientos para transmitir sus emociones y contar la historia. Los movimientos suelen ser muy precisos y controlados y ayudan a crear la belleza de la obra.
Las obras de Noh son una parte muy importante de la cultura japonesa y todavía se representan hoy en día en teatros y templos de todo Japón. Las obras de Noh son una forma de arte única y hermosa que ofrece una visión de la historia y la cultura de Japón.