Afirma que cree en la moderación y que los extremos son peligrosos. En esta escena intenta convencer a Romeo y Julieta de que no se casen, porque cree que sería demasiado extremo. También intenta convencerlos de que esperen, porque cree que sería mejor que se casaran más tarde, cuando sean mayores y maduros.
Sin embargo, cuando Romeo y Julieta insisten en casarse, Fray Lorenzo accede a ayudarlos. Esto demuestra que está dispuesto a hacer una excepción con su filosofía para poder ayudar a las personas que le importan.
Las acciones de Fray Lorenzo en esta escena también muestran que es una persona compasiva y comprensiva. Sabe que Romeo y Julieta están enamorados y quiere ayudarlos a ser felices. También está dispuesto a arriesgar su propia reputación para ayudarlos, lo que demuestra que es una verdadera buena persona.