Sin embargo, a medida que avanza la obra, sus actitudes empiezan a cambiar. Los trágicos acontecimientos, incluida la muerte de sus hijos, los llevan a darse cuenta de las devastadoras consecuencias de su enemistad. Al final, se unen en el dolor y deciden poner fin al conflicto sin sentido. Este cambio en su relación demuestra el poder transformador de la tragedia y enfatiza la importancia de la reconciliación y la paz.