La actuación de Esperando a Godot fue significativa para los actores de Sarajevo porque les proporcionó una sensación de esperanza y resiliencia durante una época de inmensas dificultades e incertidumbre. Los temas de la obra sobre la espera, el sufrimiento y la condición humana resonaron profundamente tanto en los actores como en el público, quienes vieron paralelos con sus propias experiencias en medio del conflicto en curso.