La voz de Callas destacaba por su belleza, potencia y alcance. También era una actriz talentosa y podía aportar una profundidad de emoción única a sus papeles operísticos. Callas saltó rápidamente a la fama y se convirtió en una de las cantantes de ópera más solicitadas del mundo. Actuó en los principales teatros de ópera del mundo, incluida La Scala de Milán, la Metropolitan Opera de Nueva York y la Royal Opera House de Londres.
La carrera de Callas no estuvo exenta de desafíos. Luchó contra problemas de peso y de salud, y también enfrentó reveses personales, incluida la muerte de su esposo, Meneghini. A pesar de estos desafíos, Callas continuó actuando hasta su jubilación en 1974.
Callas murió en París el 16 de septiembre de 1977. Es recordada como una de las cantantes más legendarias de todos los tiempos. Su voz y su arte han inspirado a innumerables cantantes y sigue siendo admirada por los amantes de la ópera de todo el mundo.
Callas fue un verdadero artista en todos los sentidos de la palabra. Era una talentosa cantante y actriz y aportaba una profundidad de emoción única a sus papeles operísticos. Callas pudo conectarse con el público como pocos artistas han podido hacerlo, y siempre será recordada como una de las mejores cantantes de ópera de todos los tiempos.