- Realizar entradas o salidas repentinas
- Revelar personajes u objetos ocultos.
- Crear sorpresas o ilusiones inesperadas.
- Facilitar cambios rápidos de escena.
Las trampillas se han utilizado en producciones teatrales durante siglos y siguen siendo un efecto escénico popular y versátil. Algunos ejemplos famosos de trampillas en el teatro incluyen:
- En la obra de Shakespeare Hamlet, el fantasma del padre de Hamlet aparece a través de una trampilla en el suelo del escenario.
- En el musical El Fantasma de la Ópera, el Fantasma hace varias entradas y salidas dramáticas a través de trampillas.
- En la obra La ratonera, se utiliza una trampilla para revelar el escondite del asesino.
Las trampillas pueden agregar un elemento de emoción y sorpresa a cualquier producción teatral y pueden usarse para crear momentos memorables y efectivos para el público.