No todos los teatros tienen foso. Es posible que algunos teatros más pequeños no tengan suficiente espacio para un foso, mientras que algunos teatros más grandes pueden tener varios fosos.
Si un teatro tiene un foso, generalmente está ubicado debajo del escenario. Esto permite que la orquesta esté cerca de los actores y del público, y también ayuda a crear una experiencia sonora más inmersiva.
Algunos teatros también tienen un "foso para moscas" encima del escenario. El foso para moscas se utiliza para almacenar escenografía y accesorios que pueden volar dentro y fuera del escenario.
La presencia o ausencia de un foso puede tener un impacto significativo en el tipo de representaciones que se pueden realizar en un teatro. Los teatros con fosos se utilizan normalmente para musicales, óperas y otros tipos de representaciones que requieren una gran cantidad de música. Los teatros sin fosos se suelen utilizar para obras de teatro, conferencias y otros tipos de actuaciones que no requieren mucha música.