Rice expresó su decepción por la interpretación de ciertos personajes en la película, particularmente Akasha y Maharet. Ella sintió que la película simplificó la compleja dinámica de los personajes y las motivaciones de estos antiguos vampiros. Además, Rice discrepó con el final de la película, que creía que pasaba por alto la esencia y el poder de la conclusión de la novela.
A pesar de estas críticas, Rice reconoció los elementos positivos de la película. Elogió la actuación de Townsend y la química entre él y la actriz Aaliyah, quien interpretó a la reina vampira Akasha. También elogió las imágenes y la atmósfera de la película, que en su opinión capturaban eficazmente la naturaleza gótica y sensual de su mundo vampírico.
En general, aunque Anne Rice tenía reservas sobre la película "La reina de los condenados", reconoció el esfuerzo y el talento puestos en la producción. Al final, entendió que adaptar una obra literaria a una película requiere inevitablemente ciertos ajustes y compromisos creativos.