A continuación se muestran algunos aspectos clave de la sistemática clásica:
1. Datos Morfológicos: Los sistemáticos clásicos utilizan principalmente características físicas o rasgos morfológicos como la estructura corporal, la forma, el tamaño, los patrones de color y las características anatómicas para clasificar los organismos.
2. Jerarquía taxonómica: Los organismos están organizados en un sistema jerárquico de categorías. Cada categoría, desde especie hasta filo, se basa en características compartidas dentro de un grupo y diferencias con otros grupos.
3. Nomenclatura Binomial: A cada especie se le asigna un nombre único de dos partes según el sistema de nomenclatura binomial. El primer nombre representa el género y el segundo nombre es la especie dentro de ese género.
4. Tipo de especímenes: Los especímenes tipo son especímenes representativos designados para cada especie. Sirven como puntos de referencia para futuras comparaciones y estudios taxonómicos.
5. Análisis basado en la literatura: La sistemática clásica se basa en gran medida en la literatura taxonómica, incluidas guías de campo, monografías y publicaciones científicas, para documentar y describir especies basándose en observaciones morfológicas.
6. Anatomía Comparada: Las comparaciones detalladas de estructuras físicas ayudan a identificar similitudes y diferencias entre organismos, lo que permite establecer relaciones evolutivas.
7. Claves e Identificación: El desarrollo de claves dicotómicas basadas en caracteres de diagnóstico ayuda en la identificación y clasificación de organismos. Estas claves proporcionan un proceso paso a paso para determinar el grupo taxonómico de un organismo en función de sus características.
La sistemática clásica jugó un papel fundamental en la clasificación y denominación de especies y contribuyó a nuestra comprensión de la biodiversidad. Sin embargo, con la llegada de las técnicas moleculares y los avances en genética, la sistemática moderna o la sistemática filogenética , ha surgido como un enfoque más integral que integra información genética para establecer relaciones evolutivas e inferir la historia de la vida en la Tierra.