Algunos ejemplos de acciones exageradas incluyen:
* Una persona saltando arriba y abajo con los brazos agitando en el aire para expresar entusiasmo.
* Una persona pone los ojos en blanco y suspira dramáticamente para expresar exasperación.
* Una persona pisoteando y agitando los puños en el aire para expresar enojo.
* Una persona gateando por el suelo y gimiendo para expresar miedo.
Las acciones exageradas pueden ser muy divertidas de realizar y pueden ayudar a crear sentido del humor o dramatismo en una actuación. Sin embargo, es importante utilizarlos con moderación, ya que pueden resultar aburridos si se utilizan en exceso.