Edipo ha pasado su vida ignorando su verdadero origen y los crímenes que ha cometido. Ha estado ciego ante el hecho de que mató a su padre y se casó con su madre. Pero después de conocer la verdad, obtiene los ojos del entendimiento. Finalmente puede ver el mundo tal como es y reconocer su propia culpa.
Esta paradoja refleja también la naturaleza trágica de la historia de Edipo. Ha adquirido conocimiento y comprensión, pero a un precio terrible. Ha perdido la vista, su reputación y su familia. En cierto sentido, ahora es un ciego que puede ver.