Un rendimiento plano puede ser el resultado de una serie de factores, entre ellos:
* Falta de conexión emocional con el material.
* Una falta de comprensión o interpretación de las motivaciones del personaje.
* Falta de ensayo o preparación.
* Miedo a correr riesgos.
* Falta de confianza.
Cualquiera sea la causa, una actuación plana puede ser muy perjudicial para una producción, ya que puede hacer que los personajes y la historia parezcan poco interesantes o increíbles.
Hay una serie de cosas que los actores pueden hacer para evitar dar actuaciones planas, entre ellas:
* Realizar una investigación exhaustiva sobre el personaje y la historia.
* Trabajar con un director para desarrollar una comprensión clara de las motivaciones del personaje.
* Ensayar y practicar el papel hasta que se sientan cómodos con él.
* Tomar riesgos y probar cosas nuevas, incluso si tienen miedo de cometer errores.
* Confiar en sus instintos y permitirse ser vulnerables.
Siguiendo estos consejos, los actores pueden aumentar sus posibilidades de ofrecer actuaciones dinámicas y atractivas que conecten con el público.