En primer lugar, Italia fue la cuna de la ópera. Las primeras óperas se escribieron en Italia en el siglo XVI y el estilo de ópera italiano se extendió rápidamente a otros países. Los compositores y cantantes italianos tenían una gran demanda y el italiano se convirtió en el idioma predeterminado para la ópera.
En segundo lugar, el italiano es un idioma muy musical. Tiene un sonido hermoso y es muy adecuado para cantar. Las vocales son claras y distintas y las consonantes son suaves y fluidas. Esto hace que el italiano sea un idioma ideal para la ópera, que tiene que ver con la música y el canto.
En tercer lugar, el italiano tiene una larga tradición de música clásica. Italia es el hogar de algunos de los compositores y músicos más famosos del mundo, y la tradición operística italiana es muy fuerte. Esta tradición ha ayudado a mantener el italiano como lengua de ópera, incluso en países donde no es la lengua materna.
Por supuesto, también hay algunas óperas que se cantan en otros idiomas. En los últimos años ha habido una tendencia creciente hacia las óperas cantadas en inglés, especialmente en Estados Unidos. Sin embargo, el italiano sigue siendo el idioma más común para la ópera y es probable que siga siéndolo durante muchos años más.