La frase de Lady Macbeth "Oh, nunca verá el sol el día de mañana" es una poderosa expresión de su desesperación y culpa. Muestra que ya está empezando a quebrarse bajo la presión de su culpa y que está cerca del punto de ruptura.
Esta línea también presagia los acontecimientos del resto de la obra. Lady Macbeth eventualmente se volverá loca y morirá, y Macbeth será derrotado y asesinado. El sol no saldrá en un nuevo día para ninguno de los dos.