Todo el poema gira en torno a la ira de Aquiles, el principal guerrero griego durante la Guerra de Troya. La ira de Aquiles se desencadena cuando Agamenón, el líder del ejército griego, le quita su premio de guerra, una bella troyana llamada Briseida. Luego, la historia se centra en las repercusiones de la decisión de Aquiles de no participar en la batalla como un acto de despecho en lugar de ayudar a sus compañeros griegos a luchar con honor y distinción. El poema explora cómo este único acto de ira no sólo afecta a los individuos sino que también tiene consecuencias nefastas para todo el ejército griego y sus esfuerzos en la Guerra de Troya. El tema de la ira sirve como recordatorio del potencial humano de destrucción y su impacto duradero en las experiencias tanto personales como colectivas. A través de su vívido retrato de la guerra y la tragedia, La Ilíada anima a la audiencia a reflexionar sobre los peligros y las repercusiones de la ira incontrolada y subraya la importancia de encontrar mejores formas de resolver los conflictos.